En este momento, no importa dónde te encuentres, estás creando. Si, creando lo que estás pensando y sintiendo. Eres un manifestador consciente, o tal vez no. Respira profundo y date cuenta de lo que estás sintiendo en este instante.
Tal vez te estés sintiendo agradecido, triste, millonario, decepcionado, desmotivado... cualquier cosa que sea como te sientas ahora, estás atrayendo más cosas que te van a hacer sentir de la misma forma.
MANIFESTADOR CONSCIENTE
Un manifestador consciente es el que aprende a estar en todo momento consciente de estos estados internos y saben que eso es lo que están proyectando al universo que es como un espejo y por lo tanto que regresará de vuelta a su vida.
Un verdadero manifestador es el que decide su estado de vibración interna a cada momento, el que aprende a controlar sus estados emocionales y se enfoca en todo lo bello, positivo y enriquecedor.
Un mago de la manifestación, no se preocupa de cuándo y cómo se van a manifestar sus deseos, simplemente se envuelve desde adentro de la mayor energía conocida: el amor; y se deja fluir, porque sabe que solo le llegará lo mejor.
Un co-creador consciente, se sabe y se siente uno con todo, sabe que no está separado y que no hay nada fuera de él. Sabe que todo pasa a través de él y que él pasa a través de todo.
Los verdaderos maestros de la ley de la atracción siempre están en estado de agradecimiento, no como una postura impuesta, sino porque saben que lo que desean ya está ahí y se sienten agradecidos, aunque todavía no lo vean.
Éste ser que sabe convivir con la magia que lo rodea, no duda de los resultados, aunque sus sentidos le hagan percibir lo contrario, él sabe que esa apariencia hace parte del proceso y solo se mantiene firme en su estado interior.
Pero también es consciente de que el universo en su sabiduría infinita puede hacer que las cosas sean mejores de lo que la mente humana puede imaginar, por eso, le deja una parte al universo y a la incertidumbre.
Además, sabe que las cosas no son para siempre, que todo, sea bueno o malo, pasa, y que los deseos que tiene hoy no son los mismos que va a tener dentro de 5 años, ni los que tenía 5 años atrás, entonces, disfruta el proceso más que del resultado y se mueve en armonía con el movimiento del universo, pero siempre en una espiral ascendente.
La vida es simple, somos nosotros los que hemos creado tantas reglas y no la complicamos, pero si aprendiéramos cada uno a ser un manifestador consciente, a mantener un estado interior de vibración elevada, a confiar y esperar siempre lo mejor; a amar y desear lo mejor para todo el mundo, crearíamos un mundo increíblemente maravilloso.
Y no es tarde, si logramos que solo una masa crítica aprenda a vivir de esta manera podemos dar vuelta a la forma en que vive la humanidad hoy.
Déjame un comentario si te consideras parte de esa masa crítica que puede transformar el mundo y si crees que vale la pena.
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